El administrador es la figura clave en la vida diaria de un edificio o condominio. Su rol es esencial, pero muchas veces mal entendido. Algunos lo ven como “el jefe del edificio”, cuando en realidad es un gestor que ejecuta las decisiones de la comunidad.
Las facultades reales del administrador 👨🏼💼
El administrador puede:
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Cobrar los gastos comunes.
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Velar por el mantenimiento de las instalaciones.
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Ejecutar los acuerdos de la asamblea y el comité.
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Representar a la comunidad frente a proveedores o autoridades.
Lo que🛑 no puede hacer es tomar decisiones que excedan estas facultades, como aprobar gastos mayores o modificar acuerdos sin autorización.
El problema surge cuando un administrador confunde su rol y actúa como si tuviera poder absoluto. He visto comunidades donde contrató obras millonarias sin consulta, generando deudas y desconfianza. El comité quedó debilitado y los vecinos, indignados.😡
Un comité informado marca límites claros: el administrador gestiona, pero no decide. Revisar periódicamente su labor y exigir rendiciones transparentes asegura que su rol se cumpla como corresponde.✅
El administrador es un aliado, no un dueño.
👉 ¿En tu comunidad el administrador cumple con sus facultades o ha intentado sobrepasarlas?
